Presencia
Qué manea tan extraña
tienen de quedarse
los que se van.
Porque ya no hace falta
su mano en el museo
pero inevitablemente te cruzas
con su recuerdo
tallado en mármol.
Para escribir una poesía que no sea política debo escuchar a los pájaros. Pero para escuchar a los pájaros hace falta que cese el bombardeo...
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